Ir al contenido principal

Tay.

 No, que no me mire asĂ­, ¿No sabe el daño que me hace cuando lo Ăşnico que veo en su mirada es decepciĂłn?.


Sé que tengo la culpa, pero que no me destruya con esa mirada, que me insulte, que me trate mal, que diga que me odia, que me golpee con recuerdos ya que físicamente no puede hacerlo, pero que no me vea así, porque no soporto ver que esa mirada que lo único que transmitía era felicidad e inocencia, esté trasmitiendo puro dolor, cansancio y miedo.


Lo que más me jode, es el no saber cuándo pasó, cuándo creció, a dónde fue, o cómo fue que lo perdí.


Lo recordaba más feliz, sonreía por todo y por nada, siempre le gustó estar solo, porque por alguna extraña razón, la compañía siempre le incomodó, lo raro es que aunque le incomodara, a veces le gustaba, pero no por mucho tiempo porque sentía que si no se cansaban de él, él se cansaría de los demás.


Siempre fue extrañamente extrovertido e introvertido a veces, nunca supe el porquĂ© era asĂ­, quizá nunca lo sabrĂ©, tenĂ­a muchos amigos, amigos que con el tiempo simplemente se convertirĂ­an en conocidos, es parte de crecer, a veces a las personas a las que más le  brindamos importancia y confianza, son las que suelen hacer más daño cuando te das cuenta que esa importancia deja de importar cuando tu presencia les da igual.


Por malas experiencias, maduró antes de tiempo, pero estoy seguro de que le hubiera gustado que esas malas experiencias, ocurrieran más fuera de casa, que dentro.


Siento que lo que más le afectó, fue sentir que debía proteger a su familia del que se supone que debería protegerla, desde temprana edad le tenía miedo a quien se supone que debería ayudarlo a no sentirlo, le daba terror parecerse a él, a quien se supone, que debería ser, su ejemplo a seguir.


No le tenía miedo normalmente, solo cuando se tomaba unos tragos de más y no lo reconocía, porque su cara ya no era la de siempre, su expresión cambiaba tanto que en vez de hacerlo sentir protegido, le hacía sentir un profundo miedo.



Comentarios

Entradas más populares de este blog

Negro

Tenía miedo, muchas veces lo tuve, cuando más lo sentí, fue cuando llegué a Bogotá, a un ambiente completamente distinto, venía de la costa, de un pueblo en el que todo el mundo se conoce con todo el mundo, era muy alegre, había mucho amor por todas partes y ahí tenías amigos por todos lados porque sentías que eran como tú, cosa que nunca sentí al llegar acá. No era tan común ver a gente negra, no sabía lo que era ser un negro en donde solo había blancos, nunca había sentido o visto un trato así cuando niño porque de donde venía, como había dicho antes, eran como yo, tenían mi color de piel, mis costumbres, mi pelo, mi nariz grande, mis ojos oscuros, mi sonrisa, mi fuerza. Cuando vas caminando por la calle y te quedan viendo como si no fueras humano, como si fueras un animal, o como nos suelen decir, un mono, alguien feo y distinto, cuando eres solo un niño no te das cuenta del desprecio, hasta que llegas a una edad en la que eres más consciente de que no te tratan por lo que eres, si ...

Yo.

 No sĂ©, no sĂ© quĂ© me pasa, te prometo que tambiĂ©n quiero entenderme, no te puedo pedir que me entiendas cuando ni siquiera yo puedo hacerlo. SĂ­, siempre digo, no es tu culpa, pero cuándo será mi turno? Al parecer, sĂ© amar, más no se quedarme, y no se que tipo de amor retorcido creo que puedo dar, porque se supone que el amor, no se va, relacionarte conmigo será hermoso, hasta que acabe, porque no soy malo, pero sĂ­ efĂ­mero, y eso, a mi parecer, duele más, he tratado de quedarme con ciertas personas miles de veces, pero nunca logro hacerlo, no sĂ© por quĂ© me autosaboteo tanto, hasta llegar al punto de creer que no merezco que alguien bueno llegue a mi vida Siento que soy veneno, que tarde o temprano, te harĂ© daño, te lastimare, te darĂ© la cura y a la misma vez, te la quitarĂ©, porque suelo ser alguien que salva algo quitando otra cosa, no quiero ser asĂ­, no me gusta, pero cuando creo que puedo cambiar, me vuelvo a demostrar, que yo, no soy bueno, o quizá sĂ­, pero que no lo soy para al...

¿Mi error favorito?

Dicen que cuando te enamoras de la luna, dejas de ver las estrellas, pero en sus ojos veo toda una galaxia, en su cuerpo, todo un universo, sus ojos no son azules, pero veo el cielo en ellos, le he dicho ya varias veces que me molesta que me guste tanto, tal vez crea que no es para tanto, pero si me prestase atención, cuando la tengo en frente, no tengo tiempo para ver algo más, y ni siquiera quiero hacerlo. Mis ojos solo a ella ven, como las hojas de los árboles al llegar la primavera, caen al suelo como yo caí ante ella cuando la conocí, me asusta, porque no sé si sus sentimientos sean tan profundos como los míos, o que al menos, se acerquen a la intensidad a la que mi corazón late por ella. No temo comprometerme, temo hacerlo con alguien que no esté dispuesta a hacerlo también, no temo decirte te quiero, temo a que me digas te quiero, sin en realidad sentirlo, no es para tanto dicen mis amigos, pero como hacerles entender, que estar sin ella, es como tratar de respirar sin oxígeno, ...