Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas de julio, 2024

Creo.

Creo que te busco, a pesar de que fui yo quien se marchó, creo que te amo, pero creo que fui el único que amó, creo que quieres que vuelva, aunque creo que sabes que no lo haré, creo que te he pensado más de lo que debería, creo que no lo puedo controlar, o creo simplemente, que te pienso, para creer que no te dejé. Creo que solo quiero estar solo, pero creo que en el fondo de mi alma, anhelo creer en el amor o simplemente, creer que lo merezco, y no tan solo ser el, creo que te amo. Tay.

¿Mi error favorito?

Dicen que cuando te enamoras de la luna, dejas de ver las estrellas, pero en sus ojos veo toda una galaxia, en su cuerpo, todo un universo, sus ojos no son azules, pero veo el cielo en ellos, le he dicho ya varias veces que me molesta que me guste tanto, tal vez crea que no es para tanto, pero si me prestase atención, cuando la tengo en frente, no tengo tiempo para ver algo más, y ni siquiera quiero hacerlo. Mis ojos solo a ella ven, como las hojas de los árboles al llegar la primavera, caen al suelo como yo caí ante ella cuando la conocí, me asusta, porque no sé si sus sentimientos sean tan profundos como los míos, o que al menos, se acerquen a la intensidad a la que mi corazón late por ella. No temo comprometerme, temo hacerlo con alguien que no esté dispuesta a hacerlo también, no temo decirte te quiero, temo a que me digas te quiero, sin en realidad sentirlo, no es para tanto dicen mis amigos, pero como hacerles entender, que estar sin ella, es como tratar de respirar sin oxígeno, ...

Sueños.

  No solía soñar hasta que lo nuestro acabó, fue repentino, quizás no esperé que acabara, no pensé que dejaría de recostarme en tu pecho.  Confieso que me sentía como cuando era un niño, aunque es irónico, porque de niño, nunca sentí esa seguridad, ese cariño, esa calidez, ese amor. A veces trato de buscarte, pero no lo hago y mejor escribo, quizá es el cargo de conciencia que tengo al recordar como terminó, porque lo nuestro no acabó, o eso imagino cuando sueño, porque la realidad es que el que lo acabó, fuí yo, me sentí frágil y vulnerable, no puedo permitirme serlo, aún no, no soy tan fuerte para aceptar que a veces está bien ser débil, pero también es porque no puedo permitirme amar, y mucho menos, ser amado. Soy alguien solitario que ahora sueña estar acompañado, sabiendo que no sabe estar ni siquiera consigo mismo cuando está despierto, y por eso, ahora, suele soñar más. Tay

Quizá.

 Hola, soy yo de nuevo, tal vez mi mensaje ya no te emocione, quizá ahora te molesta, quizá ya no sonríes al ver que fui yo quien escribió, quizás fui el culpable por demostrar que te quiero, por querer hacerte sentir que no eres difícil de amar, que merecías a alguien que lo hiciera. Quizá por demostrar que aunque no lo parezca, siento mucho, quizá fui un estúpido porque creí que con amar bastaba, quizá si me dolió ver tu indiferencia, quizá si me hizo mal ver qué tus mensajes demoraban más en llegar. Quizá mal interpreté todo, y creí que me querías porque de vez en cuando me decías, te quiero, quizá te quise más de lo que debería, quizá aún me siguen emocionando tus mensajes, quizá aún te pienso en todo lo que hago, no entiendo cómo pude quererte tanto sin siquiera tocarte, sentirte o besarte, pero quizá, es el no tenerte, lo que me hace aferrarme tanto a ti. Quizá sea mi último mensaje, quizá. Tay.